"" el ojo heterotópico: ¿Dialogan los dioses?

sábado, 6 de abril de 2013

¿Dialogan los dioses?




Las imágenes de santos ejercieron muchísima más influencia en el mundo que los santos de verdad, dice un aforismo de Lichtenberg. No me cabe duda. Es la proyección de las representaciones simbólicas lo que llega día tras día y año tras año hasta el fondo de la mente de los fieles y seguidores de cada religión. Cierto que algunas religiones no han cultivado ni permitido la iconografía (caso del Islam, que ha volcado su expresión en la caligrafía y en la recitación de los suras, e incluso el primitivo cristianismo no fue proclive a las imágenes) pero, por el contrario, casi todos los demás sistemas fundamentados en lo sagrado han promovido el icono hasta la saciedad utilizando todos los recursos del simbolismo, del arte y de las técnicas.

 


La representación de símbolos, desde los más sencillos a los más naturalistas y complejos, procede del Paleolítico, se afianza y potencia en las primeras sociedades urbanas y estables e impregna las creencias mágicas y religiosas en todas las culturas. Por supuesto ese afán en parte fetichista y en parte propagador del complejo sistema ideológico que hay detrás en el seno de las religiones es lo que ha llevado a sacar al exterior los rostros de las teogonías. Dioses mayores y menores, símbolos de la fertilidad terrenal y humana, encarnaciones animistas, personajes humanos tocados por la santidad o el ascetismo, animales incorporados al simbolismo o caracterización de las divinidades...en fin, una constelación de imágenes innumerables pueblan el universo del lenguaje denominado sagrado. Si a ello se le suman las creencias en otras vidas, los rituales de los muertos, las ceremonias múltiples de las que la vida social de los pueblos ha estado impregnada históricamente, el concepto del sacrificio, el asentamiento de tabúes o el constante antagonismo entre los principios del bien y del mal, así como de los opuestos o complementarios, concluimos en que los motivos de representación prácticamente reproducen como sombras, yo creo que incluso muchas de ellas superfluas, el universo instalado por las religiones.  




Con el título Diálogos de lo sagrado, se ha abierto recientemente una exposición en el Palacio de Villena, sede de muestras temporales del Museo Nacional de Escultura de Valladolid, que reúne una colección diversa de imágenes vinculadas a religiones mayores o creencias más localizadas de diversas partes del mundo. Obras aportadas a tres bandas por la Fundación Alberto Jiménez-Arellano (UVA), Museo Oriental, Casa de la India y Museo Nacional de Escultura. Tiene el gran valor de poner al alcance del ciudadano de a pie, que hasta ahora solo ha visto mayormente en directo imaginería barroca, una reunión de esculturas, fundamentalmente, que responden al pensamiento de otras culturas y expresiones. No sé si los dioses dialogan  -y con dificultad lo han hecho todas la cortes de castas y acólitos entre sí-  o si es producto más bien de la imaginación personal y del imaginario colectivo, pero como título de una especie de encuentro y confraternización de divinidades lo encuentro poético. La realización de la muestra, con la profesionalidad y pedagogía espléndidas a que nos tiene acostumbrado el Museo dirigido por María Bolaños.  










10 comentarios:

  1. Supongo que las imágenes hacen a los dioses más accesibles, y es extraño el caso del Islam, parece una religión tan impositiva que no busca facilitar ese diálogo a través de las imágenes, algo que otras han explotado durante siglos, pero no sé, tampoco soy muy entendida en la materia.

    En cuanto a la pregunta, de existir un dios yo creo que es el mismo para todos, aunque se le llame con un nombre distinto según la religión, por lo que no veo posibilidad de diálogo.

    Me han gustado mucho las fotografías, gracias por traer la exposición a domicilio, saludos!!

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    1. Pues ya ves que, según las tradiciones religiosas, hay un elenco de dioses, divinidades, etc. Tampoco todas esas representaciones significan lo mismo, obviamente. Ni se reducen a dios. La idea monoteísta de las religiones del Libro parecen haber excluido otras interpretaciones, sentimientos o visiones acerca de la relación del hombre con sus temores.

      Las fotografías...es que las obras expuestas se prestan al asombro del ojo. Muchas gracias.

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  2. Adorei as imagens e tudo o que este cantinho transmite.
    Vou ficar por cá.
    Bom domingo cheio de paz
    Vivi

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    1. Gracias por disfrutar de las imágenes. Muchas gracias y bien estar.

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  3. Muy interesante!
    Las imágenes, estupendas.
    Un abrazo

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    1. Es que la iconografía se presta a ello, y siento que algunas esculturas que están entre cristal no salgan bien y no pueda ponerlas. Fotos sin flash, ya sabes, y encima gracias.

      UN abrazo.

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  4. Tampoco los judíos son afectos a la imagen, menos aún la divina, ellos se lo pierden, para dioses visionables los paganos, humanos ellos. Me parece que los dioses entre ellos no se hablan, cuestión de competencia. !Salve!
    Bellas imágenes.

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    1. El cristianismo, y su variante católica sobre todo, ha dado un repertorio de un dios (en su Trinidad), una Virgen, santos, ángeles, demonios, etc. Un elenco complejo y variado donde el arte se ha volcado con amplitud.

      Gracias, Natàlia.

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    2. Pues a mí me viene a las mientes aquello de Dios, qué buen vasallo si hubiera buen Senyor...

      Las imágenes de los artistas son las que hacen los dioses, sin duda.

      Deslumbrante ficción.

      Miquel

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    3. Evidentemente asociación de ideas con carga de profundidad. Captado. Gracias, Miquel.

      Te doy la razón sobre el poder del arte y ese deslumbrar de imágenes como las reproducidas. Algunas de ellas no las vemos todos los días. Claro, hoy solo se ve una: TV.

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