"" el ojo heterotópico: Simbiosis

lunes, 4 de febrero de 2013

Simbiosis




Seña de identidad de la metalurgia de la revolución industrial, las ruedas dentadas parecen animales simbióticos. Actúan con sus propias leyes inexorables. Cada diente se debe a otro. Cada fuerza desencadenada fomenta otra posterior. Su vida es el movimiento, no esa paralización que convierte el artilugio en una exposición escultórica. ¿Y si realmente son esculturas? ¿Y si fueron meticulosamente labradas para que Charles Chaplin hiciera aquellas secuencias inolvidables de Tiempos modernos? Tiempos modernos ya obsoletos. Ruedas en la reserva, listas para una movilización ocasional. Los grandes héroes, como ellas, nunca mueren.




El engranaje: extraño hijo del Hombre
nacido del ingenio del Hombre.
Mas también autor de sus heridas.
Concebido para multiplicar la fuerza
simplificándola
abre y cierra el laberinto en que habita el Hombre.
Amplía el recinto, lo reedifica,
nunca lo reduce a cenizas.
El engranaje no muere en sí: nació
un día lejano de una rueda; 
antes, de una aleación;
antes, del esfuerzo descomunal que condenaba al Hombre.
A la postre, laberinto y engranaje se entienden.
Ambos se saben metáforas que cierran el círculo inmortal
donde se sigue dirimiendo
la rendición del Hombre.






Maquinaria de las compuertas de la desembocadura del río Esgueva en el Pisuerga, en Valladolid.


6 comentarios:

  1. Esa traducción que haces transforma la materia en arte ¿lo sabes verdad, Señor?
    Mientras miraba y leía, escuchaba música.
    Gracias por lo que regalas
    los seres simbiontes siempre encuentran antes las salidas de los laberintos. Bello!!

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    1. El arte nació para la satisfacción humana. No es mera contemplación. Es utilización, forma de vida, prospección del pensamiento, creatividad sin límites. ¿Quién podría dudar a estas alturas que el artesano es un artista?

      Las simbiosis están por todas partes, dentro y fuera de nosotros. Es una manera de ser. Nuestra manera de vivir. La de la Tierra. La del Universo.

      Gracias por acercar ese criterio, Anónimo.

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  2. Bon comentari sobre engranatges. Abans de pedra, ferro o fusta, existia l'engranatge sideral. Després va néixer a l'interior dels cossos. Finalment, el que va des de les màquines fabuloses al microengranatge. Ja no ens en podem desprendre. Ens atrapa sempre.

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  3. Gràcies, Olga. Certament, l'engranatge es situa entre el creixement i la metàfora. El que fomenta el desenvolupament exterior no sempre proporciona el creixement interior. Sempre atrapats, hem d'aprendre a distingir el mitjà de transformació de la matèria de l'element que ens pugui esclavitzar.


    (Gracias, Olga. Ciertamente, el engranaje se sitúa entre el crecimiento y la metáfora. Lo que fomenta el desarrollo exterior no siempre proporciona el crecimiento interior. Siempre atrapados, debemos aprender a distinguir el medio de transformación de la materia del elemento que nos pueda esclavizar)

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  4. Una raza de gigantes dejaron abandonados sus juguetes. La arqueología industrial siempre me ha parecido megalítica, sobrecogedora.

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    1. Megalítica metalúrgica, indudablemente. Cada vez la aprecio más. Una cultura cercana.

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